¿Se enterrará de verdad?

De cada rincón se saca porquería que se mezcla con la incertidumbre del pecado nunca dicho, de cada circunstancia un te quiero mentiroso, una sonrisa hipócrita... Al final todos sabremos la verdad, pero, ¿qué verdad? la verdad que sale de la boca de la verdad o una vez más alguien nos intentará apuñalar con cada sonrisa que nace de una traición cada vez más cercana... Lo cierto es que no tego la respuesta a muchas de mis preguntas indirectas, formuladas desde algún lugar más allá de lo que de mi puedo encontrar...

De cada resquicio queda impresa una mirada tuya que no mira a ninguna parte, se pierde en el infinito y grita socorro proscrito que teme una mentira bastarda, una vez más... Una vez más, te preguntas si quién te habla te pretende engañar, y es que nadie se pregunta si te duele lo que piensan porque no eres un esclavo más, de echo nadie te ha pedido nada, tú sin embargo lo has dado todo sin que nadie te dijera si estaba bien o estaba mal... Una vez más bailaremos tangos con la incertidumbre y nos haremos los tontos pretendiendo descifrar que abrazo es sincero y si con él nos van a apuñalar.

Batallas campales que libran nuestras conciencias, al fin y al cabo traiciones que no dejan ver del todo la verdad... Hemos librado una gerra queriendo tras ella conseguir la paz y enterrar achas de disputas pasadas, pero nadie se da cuenta, y es que la violencia sólo puede gestar en su vientre guerras verbales y discursiones con post de calamidad... Es muy fácil sentarte en coro a no romper las palabras, aunque de tu boca solo salgan palabrotas que al alma del que escucha pueden destrozar, pero al fin y cabo, una vez, eso ya no importa, mientras yo maltrato tú ánimo y ensalzo mi ego, rompo en silecio lo que he prometido callar. Y es que las cosas de mil formas se pueden interpretar, y mientras yo te sacudo y te parto el corazón por la mitad, puedo tirarme desde el balcón de mi ego y me puedo matar... Ya he conseguido lo que quería reducirte a lo que eres, un poco más abajo del asfalto, quizás hallas aparcado tu bicicleta en el infierno dónde van las personas que dicen la verdad...