Mentira

No es por hacer honor a un título macabro y mentiroso... Mentiras, que pudren los labios de aquellos que las mencionan, que maltratan el oído de aquel que las escucha... Mentiras de todo tipo, una sociedad mentirosa... Un mundo incierto, personas que no existen, palabras nunca dichas, oídos sordos, manos vacías.

Las últimas mentiras, proscritas y bastardas, las que salen de las bocas absurdas y resentidas... Las últimas mentiras enunciadas por oraciones olvidadas, sílabas cojas como sus patitas, letras que nunca se terminan de dibujar, caminos que nunca llegarán, señales deseñalizadas, embriaguez de mucho y poco... Brutal destierro, a la sobrevalorada verdad, sensación de desolación malescrita y malinterpretada... Siento cómo a veces por los ojos se me escapan trozos de mi alma, desgastada y traspuesta, siempre en vigilia, siempre no dormida, siempre no muerta...

Ojos que me lean, que nunca mientan, mentir está muy feo y a las buenas personas ahuyenta... Ojos que me lean que se arrepientan... Ojos que me lean, que me lean por gusto... Valga la redundancia en esta ironía presta a que si el mundo es mentiroso en nuestra conciencia escrito queda, y no importa cuándo hullamos... Ella siempre nos encuentra...